J.M. Batalla (La Casa de Carlota): "Trabajar con personas con síndrome de Down y autismo te enseña que nos queda mucho por aprender”
José Maria Batalla ha liderado durante más de 25 años equipos creativos en distintas agencias de publicidad de prestigio hasta que, en 2013, fundó La Casa de Carlota & friends, una agencia de publicidad y estudio de diseño creativo que incorpora como parte del equipo a creativos con Síndrome de Down y autismo.
SOBRE LA CASA DE CARLOTA Y LA NEURODIVERSIDAD
La Casa de Carlota es una demostración de que lo importante siempre es el porqué, y no el qué ni el cómo. Cuéntanos la razón de ser de La Casa de Carlota y cómo surge el proyecto y este nombre.
En La Casa de Carlota ayudamos a las empresas a construir marcas relevantes y competitivas a partir de propósitos más humanos y más sociales, trabajando des del “core” de las compañías, buscando promover la sostenibilidad, la responsabilidad social y liderar proyectos transformadores. Seguramente nuestro gran elemento diferenciador es que incluimos la neurodiversidad dentro de nuestros procesos de trabajo estratégico y creativo. El proyecto de La Casa de Carlota surge hace más de 8 años, cuando el mercado español empezaba a valorar el compromiso social como un factor competitivo en su estrategia.
Vuestro portal es claro: “Queremos desafiar el Status Quo con una forma de pensar diferente”. Se trata de un propósito valiente y rompedor. ¿Cómo lo estáis haciendo y con qué desafíos os encontráis?
El hecho de incluir desde un buen principio la neurodiversidad como factor diferencial (entendido como una manera de innovar y encontrar soluciones más creativas y frescas y no como un acto de bondad), sin duda, rompe la dinámica habitual de nuestro sector. Incorporamos a nuestro equipo creativo personas con síndrome de Down, autismo y otras condiciones personales que, hace no demasiados años, nadie hubiera contratado - y menos con un papel tan profesional y determinante en nuestros entregables finales.
Sin duda, LCDC es una agencia creativa única y peculiar, con unos resultados espectaculares y que cuenta con creativos con síndrome de Down y autismo. ¿Cuál es vuestra fórmula del éxito y qué ingredientes requiere?
No hay una fórmula de éxito exacta. En nuestros procesos de ideación, intentamos nutrirnos de maneras de pensar radicalmente diferentes a las que habitualmente estamos acostumbrados. Esto nos permite descubrir y enfocar soluciones estratégicas y creativas desde ángulos absolutamente diferentes, nuevos y en muchos casos, tremendamente sorprendentes.
En una entrevista en La Vanguardia, aseguras que ‘La Casa de Carlota’ no es ninguna iniciativa de inserción laboral para personas con discapacidad, sino un auténtico y profesional estudio. ¿Sois la excepción o las personas con síndrome de Down siguen excluidas del mundo laboral?
Cada vez más, no solo las personas con síndrome de Down, sino también las personas que presentan diferentes maneras de pensar que la mayoría de humanos, están siendo valoradas precisamente por su manera diferente de pensar.
Hay trabajos donde ser diferente al común de las personas significa una gran ventaja, pero lo que sucede es que hemos estado demasiados años fijándonos en lo que estos colectivos no pueden darnos en lugar de fijarnos en sus innumerables puntos fuertes.
¿Qué significa para ellos trabajar en empresas como La Casa de Carlota?
Significa algo tan sencillo y evidente como pertenecer en igualdad de condiciones al planeta y a la sociedad en la que viven.
En numerosas ocasiones, has afirmado que las carreras universitarias, los másteres y los años de experiencia no sirven de nada si no aprendemos a trabajar con la diversidad. Pero… ¿Cómo podemos aprender y cuáles son los pasos para crecer profesionalmente en equipos neurodiversos?
Eliminando prejuicios preestablecidos y apreciando lo que te pueden aportar estas personas y estos cerebros que no piensan ni actúan como tú. Cada vez más, necesitaremos aprovechar aquello en lo que las personas neurodiversas tienden a ser buenas: creatividad, el pensamiento lateral y la visión de las cosas de manera diferente.
SOBRE TI, JOSÉ MARÍA BATALLA
De liderar durante más de 25 años equipos creativos en Agencias de Publicidad como Grupo Lorente, Euro RSCG o Havas Worldwide a fundar La Casa de Carlota para contribuir a hacer un mundo mejor y más sostenible. Cuéntanos un poco el “porqué” de este giro en tu carrera profesional y cómo ha cambiado tu vida desde entonces.
En realidad sigo ayudando a las marcas a vender más, pero desde una visión más social y transformadora, que es como la sociedad entiende que deberían actuar las empresas.
Entender así los negocios, incluidos los creativos, quizás nos acerca un poco más al ser humano que todos somos y, en el caso de poder tener la suerte que yo tengo de trabajar con el equipo de La Casa de Carlota, también nos permite acercarnos al niño inocente, ingenuo y gamberro que todos somos y que siempre escondemos.
¿Cuál es la mayor lección que te ha dado tu experiencia en el mundo empresarial?
Aceptar la diversidad, venga de donde venga, y a saber aprovechar sus valores diferenciales que sin duda tienen.
¿De qué campaña u otra acción te sientes más orgulloso desde que fundaste La Casa de Carlota?
Supongo que decir que “todas” es un “topicazo”… Así que, si tengo que elegir una, sin duda elegiría el primer trabajo de diseño que hicimos para Nestlé. Por la confianza que depositaron en este estudio de locos y por ayudarnos a conseguir premios de diseño que nos colocaron “en el mapa”.
También añadiría el haber participado en el equipo de creación de la primera liga de futbol profesional para personas con discapacidad, La Liga Genuine, sobre todo por lo transformador y relevante que fue trabajar en el proyecto.
A nivel personal ¿Cómo vives y qué retos supone el trabajar con personas con síndrome de Down o con autismo?
No supone ningún reto, sino normalidad. Una vez has superado los frenos y prejuicios lógicos, trabajar con estos colectivos es muy fácil porque te ayudan a pensar que tenemos todavía mucho que aprender.
Por suerte, trabajo con un equipo que se comporta como una verdadera familia. Todos son muy buenos y cada uno aporta lo que sabe y lo que puede. Sin esta implicación constante sería difícil mantener una compañía como La Casa de Carlota, que cambia y se transforma cada día.
SOBRE VUESTRA VINCULACIÓN CON B CORP
Fundada el 2013, La Casa de Carlota es el primer estudio de diseño europeo con certificado B Corp. ¿Qué os llevó querer formar parte de este movimiento en 2015?
Lo que nos sedujo no fue el certificado en sí, sino el poder estar en contacto con empresas que tienen el impacto y el cambio social tatuado en el pecho. Nos emocionó porque es una nueva manera de entender los negocios y de contribuir a un cambio real que afecta a la sociedad, a las personas y al planeta. Todas las empresas deberían ser BCorp.
¿Cómo os ayuda B Corp a poner a las personas primero y primar su bienestar sin renunciar al beneficio económico?
Nos ayuda a entender que esto es posible y a aprender de otras empresas que lo hacen posible. Además, la colaboración que se establece entre los diferentes miembros te garantiza que estamos jugando en el mismo equipo y que sabemos a qué portería hay que chutar. Ahora mismo, como consultora y estudio de diseño, estamos colaborando con muchas B Corps y con algunas empresas que, aunque no tengan la certificación, piensan y actúan como si la tuvieran.
Para ti, el movimiento B Corp representa...
Dejarse de “bla, bla, bla” y centrase en el “cha, cha, cha”.
COGIENDO EL FUTURO POR LOS CUERNOS, NOS INTERESA ESCUCHAR TUS IDEAS SOBRE…
Las empresas que apuestan por la neurodiversidad.
Apostar por la neurodiversidad no solo debería ser una apuesta, debería ser una obligación. La neurodiversidad es un cambio y una innovación que ayuda al progreso de las empresas y a enfrentarse a los retos sociales y medioambientales desde puntos de vista nuevos y creativos.
Los prejuicios de la sociedad ante las personas con otras capacidades
Sin información eres una mosca, por eso, tenemos que hacer esfuerzos para explicar y concienciar a las nuevas generaciones sobre la riqueza de la diversidad de la especie humana. Somos todos diferentes y precisamente estas diferencias son las que tenemos que aprovechar y potenciar para crecer como seres humanos. Quizás me pongo trascendente, pero creo firmemente en lo que digo.
Cierras los ojos y ves…
Al Barça ganado tres copas de Europa seguidas ;).