Regenerar la economía en clave de inclusión social

La actual crisis sanitaria derivó casi inmediatamente en una económica que ha acrecentado la desigualdad entre las personas y su exclusión del mercado laboral, de la seguridad social, el sistema de salud (mental), la educación y el acceso a servicios básicos como la energía o la vivienda.

Aunque el impacto social de la pandemia y los efectos económicos de las políticas restrictivas varían significativamente entre países, está claro que la consecución de la mayoría de los Objetivos de Desarrollo (ODS) se ha visto afectada negativamente por la crisis de la Covid-19, que reduce las posibilidades de alcanzarlos con éxito, e incluso se han dado algunos pasos hacia atrás. La ONU estima que 71 millones de personas han caído en la pobreza extrema en 2020 y los avances en cuanto a trabajo infantil parecen revertirse por primera vez en 20 años.

Los ODS ayudan a ver el estado de la inclusión social en el mundo. Los datos nos muestran una perspectiva negativa especialmente para el ODS 10 de "Reducción de las desigualdades". Según las nuevas estimaciones del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el desarrollo humano– entendido como la medida combinada de los niveles de vida, educación y salud del mundo− va camino a descender este año en la mayoría de los países y regiones, por primera vez desde que se concibió el concepto en 1990.

A continuación, algunas estimaciones que nos ponen en alerta del impacto de la Covid-19 sobre la desigualdad, especialmente en los mercados emergentes donde el hambre, la pobreza y la exclusión social:

  • Se calcula que el ingreso per cápita mundial se reducirá un 4 %. El Banco Mundial advierte que la pandemia actual podría llevar a la pobreza extrema a entre 40 y 60 millones de personas en 2021.

  • La Organización Internacional del Trabajo (OIT) estima que la mitad de la población activa podría perder sus empleos en los próximos meses, con un coste para la economía mundial de unos 10.000 billones de dólares.

  • El Programa Mundial de Alimentos (PMA) vaticina que más de 250 millones de personas en todo el mundo padecerán una crisis alimentaria si no se toman medidas directas urgentes.

Regeneración económica para combatir la exclusión

Contamos con una oportunidad única y definitiva para reequilibrar la sociedad a través de la economía. Su regeneración es fundamental para construir una sociedad más inclusiva que mejore la capacidad y la dignidad de las personas, así como la igualdad de oportunidad para todas. 

La inclusión social se relaciona con el carácter regenerativo que habilita una economía sostenible. Una economía socialmente regenerativa supone que todas las personas están protegidas contra la pérdida de ingresos y tienen una oportunidad para comenzar de nuevo.

La transición a una economía regenerativa requiere un cambio de paradigma en el que no solo se extraen recursos de la naturaleza, sino que se devuelven. Un modelo económico regenerativo entiende el valor de la propiedad de los productos por su acceso y por su uso y concibe los modelos de negocio no solo por su valor económico (financiero), sino en el social y ecológico. Además, se potencia el concepto de la eficiencia para pasar al de la suficiencia, el paso de la economía eficiente a una resiliente.

El papel de lo público, las empresas y el sector financiero

Las instituciones públicas, las empresas y las instituciones financieras socialmente integradas (como la banca y la inversión basadas en valores) son piedras angulares de un sistema social regenerativo.

En los servicios públicos, el foco debe estar en el ser humano, la persona real que está detrás del número. En el sector empresarial, iniciativas locales como las cooperativas pueden sembrar la semilla de un cambio fundamental, con foco en la dignidad humana y el cuidado conjunto de los bienes comunes. Por su parte, los empleadores de las empresas son también clave para proporcionar una base segura en la vida de los trabajadores y trabajadoras directas o de su cadena de suministro y de los clientes a los que brindan sus servicios. Deben desarrollar prácticas de remuneración inclusivas y medidas para luchar contra la corrupción y la evasión fiscal.

En el ámbito financiero, la inclusión social mejora con la inclusión financiera.  Así lo concebimos en Triodos Bank, a través de la financiación de iniciativas y proyectos de colectivos que sufren más la brecha de oportunidades y crisis como la actual. Apoyamos organizaciones con valores que trabajan por las finanzas inclusivas en todo el mundo, porque proporcionan acceso a servicios financieros equitativos y transparentes para particulares y pequeñas empresas. La incorporación de las personas al sistema financiero estimula el desarrollo social y económico y contribuye a la consecución de varios de los ODS.

Durante 2020, la financiación de Triodos Bank en Europa llegó a 18,2 millones de clientes (el 76 % mujeres, en desventaja en muchos países en desarrollo y economías emergentes), que utilizaron estos fondos para iniciar o ampliar su negocio, generar ingresos y gestionar mejor su día a día. 

Además, para brindar más oportunidades a colectivos en riesgo de exclusión, priorizamos la financiación de empresas del sector social para los cuidados de las personas mayores o dependientes, con enfermedades y trastornos o con adicciones y necesidad de servicios sociosanitarios. También financiamos iniciativas para la integración social de colectivos de desfavorecidos a través de empresas de inserción social, centros especiales de empleo y organizaciones especializadas en el cuidado de personas con necesidades especiales de atención o, por ejemplo, organizaciones humanitarias y ONG para el desarrollo en el ámbito de la cooperación internacional.

Fruto de ese compromiso, en el año 2020, en España financiamos 1.282 proyectos sociales por valor de más de 358 millones de euros. En Europa, hicimos posible que cerca de 45.000 personas (2019: 43.000) vivan en las 570 residencias para mayores financiadas por Triodos Bank y Triodos Investment Management en 2020

Es claro, en fin, que la economía debe regenararse y hacerse más justa e inclusiva para las personas, con más oportunidades para todas. 

Este artículo está escrito por Antonio Martínez, especialista sector social de Triodos Bank España, una banca ética B Corp que trabaja para ayudar a crear una sociedad donde se proteja la calidad de vida de todas las personas y el medio ambiente.

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